Monopoly Clásico

EN GENERAL
Los jugadores se ponen en la piel de propietarios de tierras, tratando de comprar y luego desarrollar su tierra. Los ingresos se obtienen cuando otro jugador visita una de tus propiedades y el dinero se gasta cuando visitas propiedades de otros jugadores. 
En tiempos difíciles, los jugadores pueden tener que hipotecar sus propiedades para recaudar dinero en efectivo para multas, impuestos y otras desgracias.

DURANTE EL JUEGO
Un jugador lanza dos dados y mueve ese número de espacios alrededor del tablero. Si el jugador cae en una propiedad aún no poseída, tiene la oportunidad de comprarla y agregarla a su cartera o permitir que el banco lo subaste al mejor postor. Si un jugador posee todos los terrenos  de un grupo de colores, entonces puede construir casas y hoteles en estos espacios, generando aún más ingresos de los oponentes que caen allí. 
Si cae en una propiedad de otro jugador, deberá pagarle al jugador la renta de acuerdo con el valor de la tierra y de cualquier edificio en ella. Hay otras casillas en el tablero que no pueden ser compradas, pero en cambio requieren que el jugador coja una carta y realice la acción que te indique, pagues los impuestos, recojas ingresos, o incluso vayas a la cárcel.

EL OBJETIVO
El objetivo del Monopoly, como ya sabemos, es ser el último jugador en quedarse con dinero, haciendo que el resto entre en bancarrota y se queden sin nada.